
Si nos dirigimos a la calle de San Wenceslao en Madrid, podemos ver la sensibilidad con la que el callejero se refiere a los centros ocupacionales para personas con discapacidad psíquica y a los hospitales geriátricos.
Intentando poner a prueba la delicadeza de este callejero os animo a buscar los centros para drogatas, mujeres apaleadas y locos de los cojones